Almejas a la marinera receta dela abuela

Receta fácil de linguini con salsa blanca de almejas
Elizabeth Barbone elabora recetas deliciosas y creativas para las comunidades alérgicas a los alimentos y sin gluten a través de su sitio Gluten-Free Baking. Autora de tres libros de cocina: Easy Gluten-Free Baking (2009), How to Cook Gluten-Free (2012) y The World's Easiest Paleo Baking (2016).
Mientras mi abuela estaba ocupada friendo pescado en Nochebuena, preparaba este sencillo plato de pasta. Utiliza almejas enlatadas, que es lo que espero de este plato. Si no te gustan las almejas de lata, omítelas o cuece al vapor unas dos docenas de almejas frescas y sírvelas junto con la pasta.
Receta de almejas
Puede ser algo tan sencillo como un trozo de pizza con queso extra, o puede ser la receta de mousse de chocolate con leche que te dio tu bisabuela. El mero hecho de sentir cómo se derrite en la lengua te trae de vuelta... siempre.
Mi comida reconfortante favorita son los linguini con almejas. Quizá no sea tan típico... no estoy seguro. Pero es mi comida favorita y la que siempre me preparaba mi madre cuando era pequeño. Siempre pedía más almejas y me encantaba cómo crujían entre los dientes. Se podía hacer con almejas vivas, pero yo siempre prefería las de lata.
Dios mío, ni siquiera puedo decir cuántas veces el linguini y las almejas me han ayudado a sobrevivir. Como cuando mi primer novio rompió conmigo a los quince años (es lector del blog y ahora somos amigos....awkward) o la primera vez que me mudé sola y nada me sabía bien. Hay algo en este plato que siempre me sabrá a casa, no importa lo lejos que esté o la edad que tenga.
Suelo saltear un poco de ajo y chalota en un poco de aceite de oliva y mantequilla y luego añado las almejas, una pizca de pimiento rojo, un poco de zumo de limón y un cuarto de taza de jugo de almejas. Cuando la pasta está hecha, lo revuelvo todo y rallo una buena capa de queso parmesano por encima.
Receta de linguini con salsa de almejas Gloria
No hay receta tan única y significativa en toda España que unas buenas almejas a la marinera (o en salsa). Con unos pocos ingredientes de andar por casa, podemos hacer una estupenda receta saludable en 10 minutos. De esta forma, tendremos una dieta sana para cenar en poco tiempo.
Nuestras almejas Es un gran marisco con un alto valor en hierro. Se convierte en un alimento esencial para las personas que sufren anemia ferropénica (falta de hierro en la sangre). Además, también son buenas para las personas que realizan deportes con mucho desgaste energético, sobre todo de este mineral.
A continuación, pondremos unas 5-6 cucharadas de aceite de oliva en una sartén, en ella añadiremos el ajo picado y lo sofreiremos. Cuando veamos que se está dorando añadiremos la harinaSautéala bien para quitarle el sabor y añade el vino blanco con la pastilla de avecrem.
A continuación, introduciremos las almejas y un poco de agua, y dejaremos cocer tapado, hasta que se abran todas las almejas. Es conveniente que de vez en cuando mováis la sartén, para que la salsa de estas almejas a la marinera coja consistencia.
Receta de linguini de almejas en lata
Pero en la auténtica receta italiana de mejillones a la marinera, NO HAY SALSA MARINARA. En Italia existen otras recetas elaboradas con mejillones y tomate, como Cozze alla tarantina o Zuppa di Cozze (para más información, lea el párrafo siguiente "Mejillones a la marinara: algunas variantes").
Así pues, ésta es la auténtica receta italiana de mejillones a la marinara. ¡La que comerá en Italia cuando nos visite! Se elabora con mejillones frescos, limpios y purgados, que luego se saltean en aceite caliente, se mezclan con vino blanco y, por último, se sazonan con perejil y ajo. ¡El sabor a mar que desprenden es exquisito!
Los mejillones a la marinera pueden servirse como aperitivo o como plato principal. A la hora de servirlos, se pueden acompañar con picatostes de pan caliente y rodajas de limón. Otra forma estupenda de utilizar los Cozze alla Marinara es para aliñar la pasta, ¡una auténtica delicia!
Limpie los mejillones raspando las impurezas con la hoja de un cuchillo pequeño. Arranque el biso, es decir, la parte barbada que sale de la concha. Después, con la ayuda de una esponja de acero inoxidable, limpia bien sus conchas. Retire los restos de algas y arena y las incrustaciones. Desecha los mejillones rotos o eclosionados.
¡No te lo puedes perder!