Potaje de garbanzos con espinacas y huevo duro
Potaje español de garbanzos y espinacas
1. Escurrir y enjuagar los garbanzos y retirar los que estén descoloridos. Poner los garbanzos en una olla con las 4 tazas de agua, las hojas de laurel, 1 cebolla entera (recién pelada) y los dientes de ajo (enteros) sin quitarles la piel, sólo con un pequeño corte. A continuación, llévalos a ebullición y cuécelos durante 30 minutos en una olla a presión o 70-80 minutos en una normal. (Comprueba las instrucciones de tu olla para cocer garbanzos).
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4:30delicioso curry de garbanzos y espinacas | food with chetnafood with chetnayoutube - nov 19, 2019
Kenji es el ex director culinario de Serious Eats y actual consultor culinario del sitio. También es columnista gastronómico del New York Times y autor de The Food Lab: Better Home Cooking Through Science.
Este guiso de garbanzos y espinacas se basa en los garbanzos con espinacas que solía hacer con el chef John Critchley en Toro, Boston. Es uno de los aperitivos de bar más clásicos de España y se puede encontrar por toda la geografía española con todo tipo de sabores, desde chorizo ahumado y morcilla hasta preparaciones más sencillas servidas con un chorrito de vinagre de Jerez.
Esta versión vegana, a medio camino entre la sopa y el cocido, se basa en garbanzos enlatados y su líquido para darle cuerpo, pero al cocerlos a fuego lento con algunos aromáticos (ajo, cebolla, laurel y pimentón ahumado) se les devuelve todo su sabor. La parte única es el poco de jengibre que se añade al puré de tomates. No es suficiente para que resulte obvio, pero sí para añadir un poco de calor complejo a la espina dorsal salseada del plato.
Garbanzos y espinacas
Descubrí este plato en un blog llamado One Dish Closer, al que merece la pena echar un vistazo. Me hizo comprar el libro. Todavía no he probado muchas cosas de él, pero sólo esta receta ya le da un lugar en mi estantería de cocina.
En una cacerola grande, poner a hervir las patatas, los garbanzos y 750 ml de caldo. Cocer a fuego lento durante unos 10 minutos. Añadir las espinacas picadas y remover mientras se deshacen. Añadir el vinagre y cocer a fuego lento otros 10 minutos.
Mientras tanto, calentar el aceite en una sartén, añadir el ajo y el pan y remover hasta que se doren: ¡no quemar el ajo! Poner en una batidora/licuadora con las especias y las yemas de huevo y hacer un puré. Añadir el resto del caldo y volver a triturar. Mezclar con la sopa, cocer a fuego lento otros 10 minutos y añadir las claras de huevo picadas. Se puede añadir un poco de agua si se cree necesario antes de servir, pero se supone que tiene que quedar con trozos, tal vez un guiso tanto como una sopa.
Realmente es una sopa maravillosa. Hace un par de días, medio dormida, hice puré con toda la sopa y también quedó bien. De hecho, puede haber ocasiones en las que la prefieras, por ejemplo, como pequeño comienzo de una comida.
Comentarios
Para empezar, este plato no se llama "espinacas con garbanzos", es espinacas con garbanzos. ¿No le parece? "Espinacas con garbanzos" es algo que comes porque debes: es sano y aspiras a serlo. Espinacas con garbanzos" es algo que comes porque suena sexy, y tampoco sabe nada mal. Es sustancioso y ahumado, con un toque picante, y se come en pequeñas tostadas de pan frito en un bar de tapas en España.
O, ya sabes, en Nueva York en otra noche de marzo brutalmente lluviosa. Mi amiga Ang organizó una comida de tapas el viernes pasado (el bebé nos abandonó para ir a una fiesta mejor en casa de sus abuelos) y, sí, llevé un plato español a una fiesta española que no incluía ni un solo formato de cerdo. ¡Salvaje! Hey, me imaginé que otros tendrían los chorizos y jamón serranos cubiertos. Yo, quería algo de comida reconfortante española. Había probado una versión de este plato hace unos años, gracias al dulce empujón de Ximena en Lobstersquad y al instante me encantó. Parece demasiado sencillo para mantener el interés, quizá algo que se come porque "se debe", pero sabe a algo que apetece una y otra vez.
¡No te lo puedes perder!